Las organizaciones se enfrentan a una miríada de amenazas a la ciberseguridad que evolucionan constantemente y una herramienta esencial es la gestión de políticas.

Las políticas y los procedimientos de una empresa garantizan que sus empleados se mantengan centrados en sus objetivos, pero sin su cumplimiento son prácticamente ineficaces. Las consecuencias del incumplimiento, como crisis legales o financieras, pueden ser devastadoras para la reputación y los resultados de una empresa.

En esta entrada del blog exploraremos el papel fundamental que desempeña la gestión de políticas a la hora de garantizar la coherencia y el cumplimiento en toda organización.

La importancia de las políticas

Las políticas son la base de cualquier programa sólido de ciberseguridad. Sirven como un conjunto de directrices, normas y procedimientos que dictan cómo una organización aborda la seguridad. Sin políticas bien definidas, una organización corre el riesgo de tomar decisiones ad hoc, de confusión y de incoherencia en las prácticas de seguridad. Las políticas proporcionan un marco para mantener un entorno seguro y son fundamentales para lograr el cumplimiento de la normativa, algo crucial para muchas empresas.

Coherencia en la toma de decisiones

Las políticas actúan como una hoja de ruta para la coherencia en la toma de decisiones en los distintos departamentos y equipos de una organización. Garantizan que todo el mundo esté en la misma página en lo que respecta a las prácticas de seguridad. De TI a RRHH, de finanzas a marketing, las políticas proporcionan un entendimiento común de lo que se espera en materia de seguridad.

Mitigar el error humano – El error humano es una de las principales causas de las violaciones de la seguridad. Disponer de políticas bien definidas puede reducir significativamente el riesgo de que los empleados comprometan la seguridad sin querer. Por ejemplo, las políticas relativas a la gestión de contraseñas pueden ayudar a los empleados a crear contraseñas seguras y a comprender la importancia de no compartirlas.

Cumplimiento – El cumplimiento de las regulaciones y normas del sector, como GDPR, HIPAA o ISO 27001, no es negociable para muchas organizaciones. Las políticas garantizan que las prácticas de una organización se alinean con estos requisitos, reduciendo el riesgo de consecuencias legales y daños a la reputación.

Mejores prácticas de gestión de políticas

Una gestión eficaz de las políticas es algo más que crearlas; se trata de aplicarlas, hacerlas cumplir y mejorarlas continuamente. Para hacer cumplir eficazmente sus políticas de uso aceptable, primero tiene que asegurarse de que sus usuarios entienden lo que se les pide.

He aquí algunas de las mejores prácticas para la gestión de políticas:

  1. Inventario y clasificación – Empiece por crear un inventario de todas las políticas existentes. Clasifíquelas en función de su criticidad y relevancia. Asegúrese de que las políticas están actualizadas y alineadas con las amenazas y normativas actuales.

  2. Comunicación clara – Una vez establecidas o actualizadas las políticas, comuníquelas claramente a todos los empleados. Asegúrese de que los empleados comprenden sus funciones y responsabilidades en el cumplimiento de estas políticas. Los programas de formación y concienciación pueden ser herramientas eficaces para este fin.

  3. Supervisión y aplicación – Supervise regularmente el cumplimiento de las políticas y aplique las consecuencias en caso de infracción. Aproveche la tecnología, como los sistemas de gestión de eventos e información de seguridad (SIEM), para automatizar los procesos de supervisión y elaboración de informes.

  4. Mejora continua – El panorama de la ciberseguridad está en constante cambio. Revise y actualice periódicamente las políticas para adaptarlas a las nuevas amenazas, tecnologías y normativas. Involucre a las partes interesadas en este proceso para recabar opiniones y mantener la relevancia.

  5. Documentación y pistas de auditoría – Mantenga registros detallados de los cambios de política, las comunicaciones, la formación y las medidas de cumplimiento. Estos registros de auditoría tienen un valor incalculable para demostrar el cumplimiento durante las auditorías reglamentarias.

  6. Colaboración – La colaboración entre los departamentos de TI, jurídico, de cumplimiento y otros departamentos pertinentes es esencial para crear y gestionar las políticas con eficacia. Los equipos interfuncionales pueden garantizar que las políticas sean exhaustivas y estén alineadas con los objetivos de la organización.

Las organizaciones tienen la misión de salvaguardar los activos digitales de su organización, y la gestión de políticas es una herramienta indispensable para lograr este objetivo. Conseguir que sus empleados cumplan sus políticas es posible con los enfoques y soluciones adecuados. Las políticas proporcionan el marco para unas prácticas de seguridad coherentes, mitigan los errores humanos y garantizan el cumplimiento de la normativa. Aplicar las mejores prácticas en la gestión de políticas nos ayuda a adelantarnos a las amenazas en evolución y a mantener la confianza de las partes interesadas. La ciberseguridad es un campo dinámico, y sus políticas deben evolucionar con él para seguir siendo eficaces.